martes, 27 de julio de 2010

Gente normal

Hace un par de meses un compañero de trabajo natural de Castellón, ésa tierra dominada por un tipo pegado a unas gafas de sol, me recomendó un grupillo de música en cataluffin que la verdad, no había oído en mi vida porque tampoco soy un tío que se actualice constantemente en esto de la música. Manel, que se hacen llamar, están de puta madre, con trompetejas, ukeleles y todos esos instrumentos que me alegran bastante la oreja. Incluso acordeón, pero no como el del exitazo del verano Stereo Love que suena a rumano tocando en el metro, me refiero a que tocan el acordeón con salero.

Pues resulta que a casi todo el mundo que le pongo alguna de sus canciones lo primero que me pregunta después de poner cara de póker es que si entiendo lo que dicen. La verdad que hay cosas que sí y otras que no y que si te pica pues lo miras en google que pa eso está, pero que esto me lo suelte gente que escucha Bisbal, expositor de letras punteras, o tipos que no tienen ni zorra de inglés pero de la machacan con Lady Gaga, me supone cuanto menos un ligero tacto genital.

Voy a dejar aquí "La gent normal" ("La gente normal"), una versión de "Common People" de Pulp que está muy chula. Pongo también la original, que es cojonuda y así los amantes de las bandas sonoras de Estrella Damm se pueden guiar por la lengua se Shakespeare, no vaya a ser que con la de Laporta se me pierdan.

Mi tío siempre dice que con la cantidad de gilipollas que hay hoy en día, siendo normal ya tienes mucho ganado en la mayoría de los casos para que por lo menos te den trabajo. Pues eso, como dice Pulp, a ser normales bailando, bebiendo, copulando y yendo a comprar de vez en cuando al mercado del barrio, que enriquece mucho charlar con las viejas mientras se te cuelan.



domingo, 25 de julio de 2010

Nombre: Ignacio Muñoz.
Matrícula del coche-----.
Modelo: Honda Civic (aún sin puertas de gaviota).
Color: Gris meteoro.
-¿Cómo?
-Gris meteoro, es que es gris pero cuando le da el sol tiene reflejos dorados.

-Ignacio, ¿tú si fueses un perro, o sea, un animal perro, cuál serías?
-Un Bull dog americano, claramente.
-Vete a la mierda Nacho, con esos tirabuzones en el pechamen serías un puto perro de aguas como al que paseas todas las tardes...

A la vuelta del fin de semana hemos parado en una gasolinera a la altura de Requena a merendar miguelitos, tal y como es tradición en el tránsito por la zona. Un secarral del copón, sin sombra conocida y con una botella de agua como única ayuda para degustar los manjares de la tierra. Con el viento soplando del sur Manolo me ha puesto fino de glas y yo hecho lo propio con Ignacio, situado a mi izquierda. El chocolate chorreante se ha empezado a derramar y el hojaldre a desmontarse, por lo que de repente lleno de miguelito por todos lados me he dado cuenta que me había convertido en el señor de las moscas. Moscas por el hocicamen, por las medallas de la camiseta, en el miguelito... El dueño del meteoro me ha pedido que para entrar en su coche me diese una ducha o en su defecto un buen lavado y sacudido, pero las moscas ahí han seguido a la espera de que volviese a liarla.

Si hay un baño que de más asco que el de un garito nocturno es cualquiera que dependa de una gasolinera Cepsa y esa ha sido en la que el conductor ha detenido su nave. No he podido hacer mucho, pero a la que salía del bar de al lado, con baño un poco menos guarro, me he parado a mirar en su escaparate la oferta de casetes empolvados. Nada llamativo, pero no he podido evitar fijarme en la filmografía porno, más renovada porque debe ser que la demanda de este tipo de material es más fuerte. Casi me quedo allí a pasar el resto del domingo porque el conductor, al verme tirando fotografías al escaparate se ha sentido ofendido y ha ido arrancando su nave meteórica. Hemos pasado el resto del viaje "escracheando" ritmos naturales contra el asiento y dando vueltas por las emisoras buscando el último tema preferido de Ignacio: El dúo de Paulina Rubio con Pit Bull. En dos semanas me la sabré de memoria para cantársela en Ribadesella.

viernes, 16 de julio de 2010

Titulares de mierda

Este mundial ha estado manchado de guarrerías en las retransmisiones, sobre todo cuando jugaba Brasil. Muchos esperábamos la sustitución de Kaká por Elano sólo para que el locutor dijese eso de "Sale Kaka por Elano" o incluso metiendo en toda esta fiesta a Maicon. Parece que de momento Guti no se va a quedar en el Madrid y Kome no está en los planes de Florentino. Ha sido una pena que al final no podamos tener un centro del campo que dijese Guti Kome Kaka, porque hubiera estado muy fino.

De todas formas, los africanos no se cortan a la hora de poner nombres para el disfrute de los amantes de la escatología y la broma barata, como por ejemplo, yo. y para complementar estos gustos siempre está la prensa seria como El Mundo, que con sus titulares entretiene a la vez que asquea.

miércoles, 14 de julio de 2010

Para ser torero hay que echarle huevos

El otro día hablaba con otro adulto responsable y maduro sobre la suerte que tienen los toreros, ya que para llevarse tantas cornadas en la ingle, raro es que a alguno no le hayan tenido que reconstruir la zona genital en más de una ocasión.

"No, no, es que se lo colocan de tal forma que evitan el pitón... bla bla bla", intervenía un tercero....



Queda visto que ni nos convenció entonces ni ahora, pero como a los toros les de por apuntar, más de un torero se va a acabar pasando al mundo de la música. Eso sí, más que al estilo faranduliano de Jesulín supongo que tirarán al clásico, rollo Carlo Broschi, alias Farinelli.

domingo, 4 de julio de 2010

Los miniboys

Debido a mi corta edad, las despedidas de solteros no son un tema para el que tenga mucho carrete. Sólo he ido a una y tras recibir el impacto de una bola de pintura en el testículo derecho los recuerdos sobre ese día no son todo lo buenos que quisiera.

Esto no es para nada de recibo porque lo suyo es que al que se putee es al novio y no a los invitados. Por ejemplo, cuando pasé por Paris, delante de Notre Dame, un grupo de holandeses rumbosos hacía esquivar conos a un novio que vestido con un tanga y chuzo perdido, no acababa de cogerle el tranquillo a los patines de cuatro ruedas. Las costras le tuvieron que durar hasta la boda y aunque lo mismo genera algún que otro rencor, esto apunta más a lo que yo entiendo por una despedida en la que el objetivo de las putadas sea el novio.

Fuera de la violencia física, también hay muchas alternativas como las pujantes go-gordas o como en este caso vengo a hablar, los miniboys.

Si tienes un amigo que vaya a encasarse dentro de poco, sugiero que eches una ojeada a http://losminiboys.com/ donde podrás encontrar una amplia gama de servicios, desde el enano esposado, al clásico streaptease o a los "enanitos travelos". En la web recuerdan que están disponibles para todo tipo de celebraciones: "Aniversarios, divorcios, Fiestas, cumpleaños"... ¿divorcios? Ya hay que ser hijo de puta, que te deje tu mujer y encima tus amigos lo celebren con una fiesta sorpresa en la que Chiki de requetonee.

jueves, 1 de julio de 2010

Mi segunda primera vez

Hoy he comido por segunda vez en mi vida en un chino indoor. La verdad es que después de ser un fan de los tallarines nocturnos que esconden en cubos de la basura y que resisten calientes cualquier temperatura, decir que no me fío de los ingredientes con los que cocinan en los restaurantes sería cuanto menos bastante gilipollas. Por otra parte, como ya he manifestado en este blog mi agradecimiento a los chinorris, en esta ocasión no voy a volverme a deshacer en halagos hacia ellos pero sí que me gustaría comentar otros aspectos de los asiáticos en general.

Un restaurante oriental da para bastante y eso que la comida no me gusta mucho. Creo que los tallarines con carne picada y tomate Apis siguen siendo su especialidad porque el resto sabe todo a lo mismo y el pacharán que te ponen de chupito no sabe como el normal. En los bares regentados por chinos te puede caer de tapa una ensaladilla rusa mezclada con gominolas y si no gusta no es su culpa, simplemente nuestro paladar no está aún preparado para esta clase de delicatessen.

Muchos domingos veo a parejas de chinos haciéndose sus retratitos de boda en los arbustos del parque de al lado de casa donde los sudamericanos, entre litrona y litrona, juegan con el Mikasa a voley, fútbol, baloncesto o pin pon. Dicen que los chinorris no se integran, que sólo se casan entre ellos y que sólo compran la ropa en las tiendas de sus colegas.

Esto sí que es mentira y traigo documentos para demostrar que sí tienen ganas de ser españoles. A ver si no por qué parecen más orgullosos del rey de España que muchos de los nacidos aquí.



En esta ocasión, Photoshop o no mediante, podemos ver como la familia del restaurante asiático de nombre "Tai Wan" posa orgullosa con el monarca, al que raramente no se le aprecia escopeta de caza alguna.

Al no haber podido comprobar que la imagen fuese tomada en el mismo restaurante, guiándonos por el nombre del local cabría sospechar que la misma pudiese haber sido captada en una escapada furtiva del Borbón a un país oriental. Él siempre ha sido muy de enriquecerse culturalmente y la cuadrilla de jóvenes autóctonas que le roden sonrientes pudieron haber tomado buena cuenta de ello.

*Tras una larga observación no acierto a saber de qué sexo es el híbrido situado en la derecha de la imagen.