"No, no, es que se lo colocan de tal forma que evitan el pitón... bla bla bla", intervenía un tercero....

Queda visto que ni nos convenció entonces ni ahora, pero como a los toros les de por apuntar, más de un torero se va a acabar pasando al mundo de la música. Eso sí, más que al estilo faranduliano de Jesulín supongo que tirarán al clásico, rollo Carlo Broschi, alias Farinelli.