domingo, 20 de diciembre de 2009

¿Button?

Antes de disfrutar con el ragú preparado a fuego lento por Federico alias "spinuto" , mi misión era tirar la basura y comprar algo para no morir de hambre. Al Arguiñano de Perugia se le habían pegado las sábanas y las tres horas de cocina que requiere la receta suponían que estaríamos catando el ragú a eso de las cinco de la tarde, justo con el comienzo del partido del Barça.

-Reciclado, orgánico, reciclado, orgánico, recic...- Me dice mi parienta sabiendo que iba a confundirme de cubo donde tirar las bolsas.
-Venga trae.

.......

-Y dos litronas.-Le digo a la china dejando los Risketos encima del mostrador.
-Ehh...ahh..uah...uooo...-Me contesta la mujer haciendo gestos como resolviendo un cubo de Rubik imaginario entre sus manos.
-Y dos litronas, por favor.-Repito.
-Ouuuu...deneí, cané...??- Le entiendo mientras se pone colorada...

(Desenfunda)

-Aooo...uaaa...mucho mayó, mucho mayó...jijiji.

¿Mucho mayor?Tía mamona, ¡pero si seguro que los del colegio de al lado te compran el ron desde que tienen doce años!

Hay cosas que no cambian. Me quedan dos semanas para cumplir veinticuatro primaveras, no me ha salido aún la barba, sigo esperando a pegar el estirón que me prometieron cuando me compraban los abrigos tres tallas más grandes y hoy en el chino me vuelven a pedir el DNI.

Mis amigos planean dejarse bigote para nochevieja y si quiero ir a tono tendré que pintármelo. Espero no tener que pedir en casa la autorización firmada para el viaje de fin de carrera, aunque a estas alturas ya nada me sorprendería...

Por mucho que Pedrito se ponga Pedro en su camiseta siempre será Pedrito. Paquirrín, Joselito, Ramoncín... ¿Marquitos? Ahora mismo dudo del honor que me supone tener la oportunidad de entrar en tan selecto club de gente que por una u otra razón no ha terminado de dejar su infancia atrás. Sim embargo, a veces pienso que lo mío es más un problema de rejuvenecimiento, a lo Brad Pitt en Benjamin Button. Salvando las distancias, claro.

El ragú, buenísimo.